Ecosistema digital peruano: Presente y ¿futuro?

Entre 2021 y 2022 fui parte de un equipo de consultores asignados al estudio del ecosistema digital peruano. Como expertos en diferentes ámbitos, nuestra tarea principal fue ofrecer una visión completa sobre la situación del ecosistema y proponer rutas de acción en función a las actividades de USAID Perú. Para ello, a lo largo de varios meses nos sumergimos en documentación (informes, planes, leyes), que luego contrastamos con varias rondas de entrevistas con actores locales y decenas de horas de análisis posterior. Luego de un breve período de revisión, finalmente el informe ha sido publicado por USAID con el fin de que sirva a todos los actores interesados en conocer el presente de nuestro ecosistema digital y tal vez vislumbrar algo de su futuro.

Sobre el DECA

DECA son las siglas de Digital Ecosystem Country Assessment, que es el nombre que recibió el estudio y que es a su vez la metodología con la que nuestro equipo se aproximó al análisis del ecosistema digital peruano. Parte de la metodología consistió en dividir el estudio en tres pilares: Infraestructura digital; Sociedad, derechos y gobernanza digital; y, Economía Digital. Sobre cada uno de ellos, el equipo transitó por tres fases; empezando por una investigación de escritorio, más de 60 de entrevistas con actores del gobierno, el sector privado y la sociedad civil, y finalmente la escritura de un informe final con los principales hallazgos.

Si bien en la práctica esta iniciativa buscó conectar dichos hallazgos con riesgos y oportunidades para el desarrollo de los programas de USAID Perú, fue estructurado de una manera tal que permite su uso por parte de los actores locales. Vale la pena señalar además que los DECA ya se han realizado en otros países (Colombia, Kenia, Nepal, Serbia) y por lo menos una decena más se están ejecutando ahora mismo alrededor del mundo.

Principales Hallazgos

En cuanto a los principales hallazgos del DECA Perú, me gustaría resaltar los siguientes:

  1. El ecosistema digital peruano presenta un desarrollo heterogéneo y lleno de contrastes. Por un lado, existen avances importantes en la conectividad digital, pero concentrados en las grandes ciudades de la Costa. También se han impulsado programas de alfabetización y creación de competencias digitales, pero no existe un marco que permita definir y estandarizar su despliegue a nivel nacional. Así mismo, aunque las políticas de conectividad han permitido el despliegue de mayor infraestructura, activos como la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica actualmente se encuentra sub-utilizada.

  2. En cuanto al desarrollo de la regulación, se observa que el país cuenta con múltiples leyes, reglamentos y otras normas que ordenan el uso de las tecnologías digitales. Si bien es cierto existen carencias regulatorias importantes, estas se concentran en problemas emergentes como la ciberseguridad, la economía digital y la telemedicina. Pese a ello, múltiples hacedores de políticas públicas, especialmente desde el Congreso, han propuesto diferentes proyectos de regulación (más de 180 en el período 2016-2021), algunos de los cuales representan un retroceso en materia de derechos humanos.

  3. El ecosistema está pasando por un momento de transición, en el que se están definiendo los liderazgos. En el sector público, la Secretaría de Gobierno y Transformación Digital se ha convertido, a nivel normativo, en la entidad más importante en materia de digitalización y viene liderando múltiples procesos de transformación digital. Sin embargo, su posición jerárquica y ubicación dentro de la Presidencia del Consejo de Ministros suponen un riesgo para la continuidad de sus reformas. En el sector privado, se observan diferentes alianzas sectoriales, que en general tienen como denominador común la oposición a ciertas propuestas de política pública percibidas como regresivas y que no se han sometido a discusión pública.

  4. Respecto de la economía digital, la regulación actual parece ser suficiente para promover su desarrollo, pero existen obstáculos estructurales que impiden concretar los planes y estrategias (dinero electrónico, inclusión financiera, open banking) propuestas por el sector público. Por ejemplo; los elevados niveles pobreza, la baja competitividad de las MYPES, la informalidad de la economía, entre otros.

Los invito a revisar el informe completo aquí, actualmente disponible en inglés.

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